jueves, 20 de diciembre de 2012

Científicos españoles crean un hormigón biológico

Científicos del Grupo de Tecnología de Estructuras de la Universidad Politécnica de Cataluña han desarrollado un nuevo hormigón biológico que permitirá la construcción de fachadas vivas.  El uso de este material permite reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera, mejora la estética de las ciudades e incrementa la eficiencia térmica de los edificios.
La principal característica de este nuevo hormigón es que permite que proliferen musgos y líquenes de manera natural y acelerada. Se trata de un material ideado para utilizarse en fachadas de edificios y otras construcciones realizadas en climas mediterráneos.
Los científicos han creado este hormigón biológico con la combinación de dos materiales a base de cemento. Uno de ellos es el cemento tradicional carbonatado y el otro el cemento de fosfato de magnesio. La principal aportación del nuevo material son sus ventajas medioambientales, térmicas y ornamentales.
Ahora se está estudiando la forma de favorecer el crecimiento acelerado de los organismos en el hormigón. El objetivo es obtener un aspecto atractivo de los edificios en un periodo aproximado de un año. Además, pretenden que las fachas construidas con este hormigón  muestren una evolución temporal con cambios de coloración en función de la época del año.